¿Cómo se elaboran las patatas fritas Jalys?
Seguimos minuciosamente la receta tradicional. De esta manera, el resultado es siempre espectacular.
Seleccionamos
la mejor patata agria
La calidad de la materia prima es nuestra absoluta prioridad
Lavamos, pelamos y cortamos
El corte, muy fino y delicado, es clave para el toque crujiente
Freímos, escurrimos y condimentamos
Este paso es muy importante, sobre todo en cuanto a tiempos se refiere
Envasamos y enviamos a tu casa
En menos de 24 horas las tienes en tu casa, y con envío gratis
Selección de la mejor materia prima
Nuestro proceso de fabricación empieza en el campo. En la Comarca da Limia, se cultivan aproximadamente 120 millones de kilos de patatas al año, y tenemos la capacidad de escoger la mejor. Contamos con un departamento especializado solo en el proceso de selección.
¿Cómo descubrimos cuál es la mejor? Lo primero que hacemos es analizar las semillas de patata agria y el proceso de sembrado. Seguimos un control semanal de las patatas que vamos a utilizar todo el año. En septiembre y octubre, tiene lugar el proceso de recolección.
A partir de ahí, seguimos un estricto procedimiento de prueba. Visitamos a los productores, que nos muestran las diferentes variedades ya recolectadas.
Visitamos sus naves con un calibre, un detector de humedad y un medidor de materia seca para realizar un análisis in situ y ejecutar la primera criba.
De las opciones que cumplen una serie de requisitos y que nos gustan visualmente, cogemos una muestra, que posteriormente probamos hasta dar con el mejor resultado.
Almacenamos con mucho cuidado durante todo el año en cámaras de conservación.
Lavado, pelado y corte
Lavamos con mucho cuidado nuestras patatas, para eliminar los restos que puedan quedar de tierra. Hacemos un pelado centrífugo, y las volvemos a lavar.
Con nuestra cortadora, realizamos el filo de la materia prima. Procesa unos 40 kilos de patata cada veinte segundos.
El corte es extrafino, para asegurar que el crujiente de la patata sea óptimo.
¡Turno de freír y de escurrir! Sin olvidarnos de condimentar
Contamos con una línea de dos freidoras que actúan como sartenes tradicionales. Cada una de ellas cuenta con unos 800-900 litros de aceite de girasol de la empresa ourensana Abril.
Las freímos como lo hacían nuestras abuelas: a fuego lento y con mucho mimo.
Eso nos permite hacer ciclos rápidos de fritura, con un escurrido posterior para que la patata quede seca.
En ese momento, es el turno de enfriar y condimentar, según la variedad que estemos produciendo en el momento. Bajamos la temperatura y salamos, y añadimos las especias pertinentes, que son saborizantes naturales y de origen vegetal.
Envasamos y... ¡Listas para enviar a tu hogar!
Desde el pelado hasta el empaquetado final, tardamos 4 minutos. Ahí garantizamos la calidad de nuestro producto. Envasamos todas nuestras bolsas con atmósfera protectora.
Todas las tardes recibimos la visita de la empresa de transporte. Al día siguiente, en menos de 24 horas, todos nuestros clientes reciben su pedido.